Hacer régimen es el único tratamiento para bajar de peso. No hay otras opciones. Todos los productos quemagrasas, productos desintoxicantes, fármacos ansiolíticos, etc. son complementos de la dieta, pero por sí solos no consiguen ningún efecto sobre el peso. La gran preocupación cuand nos ponemos manos a la obra es mantener el peso al hacer dieta.
Dietas y grasa
La dieta es una forma de alimentarse. Cada familia sigue dietas determinadas. Y dependiendo de las características de estas y de nuestra genética, habrá una predisposición a la acumulación de grasa en el tejido adiposo.
Sólo en la obesidad están implicados mecanismos muy complejos que aún no se ha conseguido resolver. La mayoría de casos, que son sobrepesos, o aumento de peso con la menopausia, tienen solución. Es una cuestión de cambios alimentarios, de descanso y de movilizarse un poco más.
Prepararse para un cambio… definitivo
Si quiere mantener el peso al hacer dieta debes empezar por ir poco a poco. Los cambios alimentarios deben adoptarse progresivamente. La dieta que siga el individuo hay que modificarla, eliminar alimentos a los cuales existen intolerancias alimentarias, añadir algunos que faciliten la eliminación de tóxicos, etc.
La dieta debe priorizar la eliminación de tóxicos, de ácidos, que se acumulan en nuestros tejidos y bloquean el buen funcionamiento de las células. Es fundamental para que funcione un tejido que en el espacio extracelular no hayan endotoxinas. Ese tejido favorece el acúmulo de grasa en el tejido adiposo. De hecho cuando el tejido adiposo empieza a engordar, es el signo claro de que todos nuestros tejidos están llenos de endotoxinas. Hay que vaciar el organismo de estas endotoxinas para mantener la salud.
La dieta depurativa es la única que consigue este objetivo. Sin embargo, después hay que hacer los cambios necesarios para que no se «ensucien» otra vez los tejidos. Esa es la única forma de poder mantener el peso y por supuesto la salud.
Los cambios posteriores a una dieta depurativa, a un ayuno controlado por el médico, son como mínimo eliminar alimentos a los cuales el paciente es intolerante y cenar poca cantidad y sin proteína, para evitar la sobrecarga de ácidos. La proteína se ha de tomar en forma de complementos de aminoácidos, que no generen ácidos. Es la única forma de ayudar al sistema a hacer la función desintoxicante que nuestro organismo hace por las noches.