El gluten es una molécula que existe en la mayoría de cereales. Suele producir inflamaciones a nivel intestinal, no digiriéndose correctamente y provocando lo que conocemos por celiaquía.
Las personas celiacas se diagnostican generalmente de pequeñas por presentar síntomas claros de esa inflamación intestinal cuando toman gluten. La sintomatología son diarreas, distensión abdominal y dolor abdominal. Algunos casos debutan con bronquitis o síntomas como el asma incluso a veces sólo con dermatitis.
En el caso de alergia al gluten, o sea de celiaquia, no hay más tratamiento que la eliminación absoluta del gluten. El paciente debe hacer una dieta exenta de gluten.
Celiaquía: ¿Alergia o Intolerancia?
Hay otros casos que no son alérgicos sino que son intolerantes. ¿Qué diferencia hay? Sencillamente la respuesta es de tipo inmunológico. En el caso de la intolerancia, los síntomas son más leves o más tardios, no están tan claramente relacionados con la ingedta de gluten, además suelen ocurrir en personas adultas, con lo cual suelen pasar desapercibidos y se atribuyen a dispepsias diversas. El diagnóstico es más difícil.
Hay muchas personas intolerantes al gluten que sólo se manifiestan con sintomatología nerviosa, con ansiedad, irritabilidad, lo cual puede pasar por alto este problema tan sencillo que simplemente eliminando el gluten de la dieta solucionamos el problema y evitamos la toma de fármacos innecesarios.
En el caso de las dietas de adelgazamiento nos encontramos con muchísimas personas que tienen intolerancia al gluten y a otros alimentos. Mientras no eliminemos esos alimentos la pérdida de peso es muy difícil y el mantenimiento aún más. Además muchos problemas de ansiedad están asociados a las intolerancias alimentarias. Hay que eliminar de la dieta el alimento al cual somos intolerantes para evitar esas pequeñas inflamaciones intestinales que a la larga pueden incluso generar otras patologías más graves.
Síntomas
Hay algunos síntomas que no asociamos a la intolerancia al gluten. Diarrea, estreñimiento, cefalea, erupciones cutáneas, dolores de pequeñas articulaciones, distensión abdominal… Todos ellos desaparecen en el momento que limpiamos nuestro cuerpo del alimento que los desencadena.